El año 2015 ha sido realmente animado en cuanto a noticias sobre tecnología, aquí os dejo los mejores momentos del año. El Resumen Tecnológico del año 2015.
Feliz Año 2016 a todos!!
El Hardware es el nuevo Software. Arduino, Raspberry Pi y DIY.
¿Qué tienen en común Belén Esteban y Arduino? La solución unas líneas más abajo.
Llámame friki, pero si te gusta la tecnología tienes que irte ya a Amazon a comprarte un Arduino. ¡Vamos! ¿A qué esperas? Y si no te gusta la tecnología entra de todas formas para que veas de lo que hablo y me puedas insultar con conocimiento de causa. Bueno, pues ese cacharro que estás viendo ( y otros tantos parecidos: Raspberry Pi) van a revolucionar el mundo tal y como lo hizo el software en los últimos 20 años. Read more
Car2go, Bluemove, respiro. El carsharing es muy real. ¿Cuál es el mejor?
El concepto de carsharing se confunde muchas veces con el de carpooling, que, aunque pueda parecer lo mismo, en esencia es diferente. Por un lado, en el carpooling el objeto es aprovechar los huecos que tienes libres en tu coche para llevar a otras personas que tienen un origen y destino igual que el tuyo. Mientras que en el carsharing lo que haces compartir tu/un coche con otras personas que pagan por el uso a modo de alquiler.
Ejemplos de Carpooling: Blablacar, Amovens
Ejemplos de Carsharing: Bluemove, Respiro, Car2go y Socialcar
En otro momento hablaremos de Carpooling y del impacto que está teniendo en la forma en la que las personas se mueven entre ciudades, y los conflictos que está provocando con empresas de transporte de autobuses. Ahora quiero centrarme en carsharing y su potencial impacto en la forma de cómo nos movemos en las ciudades.
Carsharing, ¿a quién le encanta y quién lo odia?
Como he comentado, el carsharing es básicamente el alquiler de coches por particulares o empresas de una forma que hasta hace muy poco parecía ciencia ficción. El alquiler de estos vehículos suele ser por horas, aunque también los podemos alquilar por día.
Su funcionamiento es sencillo: te descargas una app, te registras (carnet de conducir y tarjeta de pago), vas a un punto de validación para validar tu carnet de conducir y ya estás listo para poder alquilar. El siguiente paso es buscar en tu app donde tienes disponible un vehículo, lo reservas, lo usas y pagas. Venciendo la fase más problemática de la validación de tu carnet de conducir, el resto es muy sencillo.
¿A quién favorece?
Seguro que se os están ocurriendo muchas utilidades de este servicio, sobre todo para aquellos que vivís en grandes ciudades donde tener coche supone unos costes añadidos importantes a la propia compra: parking, multas, mantenimiento, seguro… Pero no sólo es bueno para los usuarios, sino también para las ciudades.
En las grandes ciudades, es indiscutible que el tráfico, aparcamiento y la contaminación son problemas graves que están llevando a los ayuntamientos a poner en marcha medidas extraordinarias para limitar el uso de vehículos . Teniendo en cuenta que los coches están prácticamente todo el día parados ocupando una plaza en algún sitio, si en vez de tener la posesión de un coche lo que haces es coger uno cuando lo necesitas, quedando éste libre cuando lo dejas para que lo use otra persona. El número de horas que ese vehículo se usa al día se multiplica por 3 o por 4 . Es por tanto lógico pensar que, en la pura teoría, se traduciría en 3 o 4 veces menos coches en Madrid y, por tanto, muchas menos plazas de aparcamiento necesarias en la ciudad. Esta teoría, tendría difícil aplicación en las situaciones de hora punta debidas al trabajo, donde el transporte público debería complementar al carsharing. Si además estos vehículos en alquiler son eléctricos y se fomenta que así sea, podemos soñar con el descenso de la contaminación en las grandes ciudades.
¿A quién puede dolerle?
Después de usar el servicio de car2go creo que los taxistas y empresas de alquiler tienen una nueva preocupación . Hacer un trayecto hoy de 9 minutos me ha costado 1,71€, lo que no llega ni a la bajada de bandera de un taxi… Es cierto que para que realmente pueda afectarles debe haber una flota muchísimo mayor de coches a la que hay actualmente, pero no me cabe duda que, si le salen las cuentas a las empresas de carsharing, habrá muchos más coches disponibles.
Car2go, mi experiencia
En esta entrada quiero hablaros del último en llegar a Madrid, y que es precisamente el único que he usado personalmente y del que puedo hablar desde la experiencia. Para obtener información más precisa del resto podéis leer la experiencia de los chicos de Gizmodo en Bluemove, y la experiencia de Viviendo Madrid con Respiro.
El registro es lo más tedioso del proceso, pues además de tener que dar muchos datos (personales, carnet de conducir y tarjeta de crédito), algunos de ellos tienen que ser validados por una persona (en el caso de Car2go tienen acuerdo con una autoescuela donde puedes ir a validar tu carnet). En mi caso fui a una autoescuela que me quedaba cerca y validé el carnet de conducir (fue un proceso rápido).
Pasado este proceso, el resto es muy sencillo. Abrimos la aplicación, escogemos el coche que queremos alquilar y lo reservamos. Podremos tenerlo reservado durante 30 minutos, pasado ese tiempo quedará libre para el alquiler.
Una vez llegamos al coche, nos aseguramos que el coche es el que tenemos reservado y presionamos el botón de la app de comenzar el alquiler. Pasados unos segundos el vehículo, por arte de magia, se abrirá. Entramos en él, cogemos las llaves que están a la vista, verificamos está en buen estado, respondemos las preguntas que nos hacen en la pantalla táctil incorporada al vehículo y a conducir.
Al finalizar la conducción, apagamos el coche, salimos del mismo y él sólo se cerrará. Automáticamente te llegará el cargo por el trayecto realizado. Es importante recalcar que al ser un coche eléctrico no es necesario pagar la zona de estacionamiento regulado. En el caso de las otras opciones, al ser de motor de combustión tendremos que pagar si lo aparcamos en zona regulada.
Car2go actualmente tiene disponibles 350 coches en Madrid, todos eléctricos.
¿Cuál es la mejor opción?
Desde mi punta de vista no hay ningún vencedor, ya que depende de las necesidades que tengamos. Depende si queremos ir de un punto A a uno B, y ya está (estilo taxi), o si por el contrario quiero tener el coche disponible por mucho tiempo, aunque no lo use muchos kilómetros.
El más barato sin duda para trayectos cortos en el tiempo es car2go , ya que se paga por minutos y no tiene costes adicionales por km si hacemos menos de 50 km en el alquiler. Si vamos a necesitar el coche para hacer un recado y lo necesitamos disponible aunque no lo movamos seguramente sea mucho más barato ir a soluciones tipo Bluemove y Respiro .He realizado una tabla comparativa en la que he elegido las opciones de Bluemove y Respiro sin cuota mensual/semestral (en estas opciones, si pagas cuota mensual/semestral el coste por hora es menor. Car2go no tiene cuotas). Para poder compararlos he elegido dos trayectos: uno de 10kms y otro de 50kms, ambos por ciudad. Para comparar con el caso Car2go supongo que 10kms los hacemos en 20 minutos y que 50kms los hacemos en 100 minutos.
|
Bluemove |
Respiro |
Car2go |
|||||||
|
Coste/h |
Trayecto 10km |
Trayecto 50km |
Coste/h |
Trayecto 10km |
Trayecto 50km |
Coste/min |
Trayecto 10km |
Trayecto 50km |
|
|
Economy |
5,40 € |
7,90 € |
23,30 € |
5,55 € |
8,05 € |
23,60 € |
N/D |
N/D |
|
|
Economy Cool |
5,80 € |
8,30 € |
24,10 € |
N/D |
N/D |
N/D |
N/D |
||
|
Comfort |
6,20 € |
8,70 € |
24,90 € |
7,10 € |
9,60 € |
26,70 € |
N/D |
N/D |
|
|
Comfort Plus |
7,20 € |
9,70 € |
26,90 € |
9,00 € |
11,50 € |
30,50 € |
N/D |
N/D |
|
|
Coche eléctrico |
6,20 € |
8,70 € |
24,90 € |
N/D |
N/D |
0,19 € |
3,80 € |
19,00 € |
|
| +0,25€/km | +0,25€/km | +0,29€/km a partir 50km | |||||||
Espero que os sea útil y os agradezco que comentéis en este artículo con vuestras experiencias con estas servicios de carsharing.
¿Quieres ver online el estreno de Star Wars? Adiós Ventanas de Exhibición.
Ya os hablé extensamente sobre las ventanas de exhibición (o ventanas de explotación) en un artículo de hace algún más de un año. En el mismo fantaseaba sobre el futuro del cine y de cuáles eran las claves para que éste se adaptara a las necesidades actuales de las personas amantes del Séptimo Arte.
Ayer Soraya Sáenz de Santamaría anunció las modificaciones a la Ley de Cine, entre las cuáles estaban dos importantes: las subvenciones se darán antes de que se exhiba la película y no será necesario respetar los 3 meses que establece hoy la ley para emitirla a través de un medio distinto al cine para no perder dichas subvenciones. Fue muy notorio el lanzamiento de «Carmina y Amén» de Paco León, que la estrenó a la vez en salas de cine e internet. Para poder hacerlo tuvo que renunciar a todas las ayudas públicas.
Streaming, Netflix y ventanas de exhibición
¿Quiere decir ésto que ya podremos ver Star Wars online el día de su estreno? Sí y no. Obviamente no para el estreno del 18 de diciembre, pero para las próximas que llegarán será una decisión comercial que tendrán que acordar las plataformas online, las productoras, las distribuidoras y los exhibidores. Lo que está claro es que se da un pasito en esa dirección y que el mercado mandará sobre lo que ocurrirá por sí solo y sin dependencia de leyes anacrónicas y estúpidas.
¿Estamos ante el poder tener un spotify del cine? Lo voy aún muy complicado porque las grande productoras no están por la labor aún. La única productora que apuesta por este modelo es Netflix, recién llegada a España, que además de ofrecer cine y series online realiza superproducciones que emite directamente en online sin pasar por las salas de cine.
Piratería
Si razonamos sobre los posibles efectos a corto y medio plazo, uno de ellos es el descenso de la piratería. Está demostrado que cuando se lo ponemos fácil al espectador y a un precio asumible éstos no piratean pues prefieren disfrutar de su película en el sofá de su casa con una calidad de sonido y de imagen de acuerdo a la pantalla full hd o 4k que tiene en el salón. ¿Y por qué piratean? Por la disponibilidad. La publicidad y el marketing crean la necesidad, y si para cubrir esta necesidad tiene que pasar por pagar mucho dinero o se tienen que desplazar a una sala de cine (lo mismo ni le gusta o no puede), de una forma u otra se va a buscar la vida para disfrutar de esa película.
Creo que aún queda mucho por andar, pero la noticia de la eliminación de las ventanas de exhibición, con la que hoy nos levantamos, ayuda a dar, sin duda, ese primer paso.
¿Crees que esto es bueno para ti y tu modo de disfrutar del cine?
¿La emoción matará a la razón? ¿Marketing emocional o racional?
Este es un blog sobre tecnología, marketing y comportamientos sociales. Mañana son las elecciones catalanas y no, no hablar de ellas, aunque tiene mucho de lo que hablar, pero no lo voy a hacer. Quiero hablar con cierta perspectiva de como se han desarrollado las campañas y lo que puede ocurrir mañana.
Hace un tiempo tuve la suerte de que me invitarán a asistir a un evento organizado por Atres Media en que participaban figuras mundiales de economía, deportes, cocina… En el mismo pude ver a Gasol, Durao Barroso y a otros muchos. En este artículo quería destacar a Juan Verde. Este señor es el primer español que trabaja en la candidatura de un presidente de los EE.UU, el señor Obama.
Durante su exposición nos contó como se apoyaron en las redes sociales, el big data y el crowdsourcing para conseguir algo que parecía un sueño. El secreto de su éxito no fue otro que la movilización de cientos de miles de voluntarios por su causa y posicionar su mensaje en la emoción, y no en la razón. Vamos a ver, la razón es algo necesario… pero no suficiente. Tenemos que conseguir llegar a la gente con nuestro mensaje cargado de sentimiento y pasión por una idea, una sola idea, sencilla de entender y con la fuerza suficiente para mover a masas entorno a la misma.
He visto desde el otro lado de la pantalla como se han movilizado los partidos no independentistas con un mensaje cargado de razonamientos, de análisis y de estimaciones. Pero el mensaje era demasiado complejo de entender, y sobre todo estaba vacío de sentimiento, no hablaba al pueblo catalán, era para que lo escucharan los partidos independentistas, porque si hubieran querido hablar al pueblo catalán tendrían que haberlo hecho desde el corazón, cargados de razonamientos, pero de una forma mucho más emotiva. Ensalzando la realidad de las familias que se pueden quedar rotas al otro lado de la frontera, contando que los poderes actuales de este país sólo nos representan de forma instrumental pero no son portadores de nuestros sentimientos. Porque somos muchos los que tenemos amigos catalanes y muchos más lo que quieren que la cosa se quede como está porque estamos orgullosos de que sean parte de un todo que hoy llamamos España.
Sin embargo los independentistas sabiendo que su discurso no podía ser racional de ninguna de las formas, han reducido su mensaje al sentimiento de independentismo, sin miramientos a sus consecuencias, que muchos especialistas estiman que pueden ser malas para España y desastrosas para Cataluña. Aun cuando creo que han sabido moverse mejor que los demás, lo veo demasiado vacío de razones pero puede que no sea necesario cuando se habla desde la emoción.
No sé que pasará mañana y no sé si finalmente ganará la emoción a la razón, lo veremos.
En marketing también tenemos este problema, tenemos que por un lado atender a objetivos comerciales y económicos pero a su vez tenemos que llegar con un mensaje que movilice a tus clientes en la dirección que necesitas. Siempre te dicen «baja el precio verás como vienen más», esto es una forma racional de movilizar a personas, pero sin embargo ocurren dos cosas importantes: No vas a movilizar a aquellas personas que no son sensibles al precio sino a otros matices como la experiencia de compra, los servicios de valor añadido y la experiencia post-venta. Y segundo, quien viene por precio se va por precio. En un mundo en libre competencia nunca podrás ser el más barato de forma continua y sostenible.
Por tanto nuestros mensaje deben estar cargados de razones pero envueltos en emociones, sólo así podremos movilizar de forma sostenible a esos clientes que realmente son capaces de cambiar su comportamiento y quedarse contigo.
